Día 3 – AMOR INDOMABLEMARCOS 4:40 (NTV)
Luego Él les preguntó:
“¿Por qué tienen miedo? ¿Todavía no tienen fe?”.
¡¡¡Porque Jesús es Dios, es lo suficientemente grande para tener razones para dejarnos pasar por cosas que no entendemos; pues su poder no tiene límites, pero su sabiduría y su amor tampoco!!!
A veces cuando vamos a Jesús, Él deja que ocurran cosas que no entendemos.
Él no hace las cosas según nuestro plan, o de un modo que para uno tenga sentido.
Sin embargo, Él nos ama más de lo que esperamos.
La naturaleza no se preocupa por nosotros, le somos indiferente, pero el amor de Jesús por nosotros, los que en Él creemos y confiamos, es un amor “indomable”.
Si los discípulos hubiesen entendido que Jesús los amaba, si en verdad hubieran entendido que no solo es poder, sino que también es amor, no hubiesen tenido miedo.
Su premisa de que si Jesús los amaba no les ocurriría nada malo era errónea.
Y es que el Señor Jesús puede amar a alguien y aun así dejar que le ocurran cosas aparentemente malas (Romanos 8:28), porque Él es Dios y sus planes son mayores que los nuestros. (Jeremías 29:11)
Si usted cree que Dios es tan grande y poderoso, pero que puede enfadarse con Él porque no evita su sufrimiento, entonces también tiene que creer que un Dios tan grande y poderoso puede hacer cosas que usted no entiende. ¡Tiene que aceptarlo!
Una maestra de escuela dominical lo expresó de manera hermosa a través de este breve comentario: “Dios es Dios, y porque es Dios es digno de mi adoración y mi servicio. No encontraré descanso en ningún sitio que no sea su voluntad, y, necesariamente, esa voluntad está infinitamente, inmensurablemente, indescriptiblemente más allá de mi entendimiento sobre los planes de Dios”.
Si usted está a merced de la tormenta, su poder es incontrolable, y la tormenta no le ama; recuerde que el único lugar en el que estará a salvo es en la voluntad de Dios. (Marcos 4:35-49)
Pero debido a que Él es Dios y usted no, nunca llegará a entender de forma completa qué es lo que Él va a hacer, porque, necesariamente, su voluntad es demasiado grande y demasiado asombrosa para que nosotros podamos entenderla.
Quizá podemos pensar, “¿y eso no es peligroso?”;
pues ¿Quién ha dicho que no sea peligroso? Pero…
¡¡¡El Señor Jesús es bueno siempre, y Él es el Rey!!!
Piense y reflexione en esto:
✓ ¿Cómo podemos tener paz en Cristo en medio de circunstancias que normalmente provocan ansiedad o desesperación?
✓ ¿En qué área de su vida está esperando que Jesús provea de su ayuda?
MARCOS 4:41 (NBV)
Ellos, asustados, se decían: ¿Quién será este que aun los vientos y las aguas lo obedecen?
