SALMO 40:1 Pacientemente esperé al Señor, y Él se inclinó a mí y oyó mi clamor. (RVA’15)
SALMO 37:3-5 Confía en el Señor y haz el bien. Habita en la tierra y apaciéntate de la fidelidad. Deléitate en el Señor y Él te concederá los anhelos de tu corazón. Encomienda al Señor tu camino; confía en Él, y Él hará. (RVA’15)
♥ Aprendamos a esperar pacientemente en el Señor, y en Su voluntad. El Señor dice:
“Te guiaré por el mejor sendero para tu vida; te aconsejaré y velaré por ti”. (Salmo 32:8)
Practicar la paciencia es una tarea difícil. Esto es especialmente cierto cuando esperamos en el Señor y Su voluntad para nosotros, pues Él tiene su propio calendario.
Pero los creyentes que confían en que Dios cumplirá su voluntad, son recompensados generosamente con el deseo de sus corazones:
- La disposición de esperar revela el valor de lo que la persona desea.
Imaginemos, por ejemplo, que una joven anhela tener un esposo. Ella debe decidir si dar más importancia a casarse, o esperar con paciencia el compañero elegido por Dios. Si su prioridad es lo primero, podrá aceptar una oferta que es menos de lo que el Señor tenía para ella. El hombre pudiera ser un buen creyente, pero no el adecuado seguidor de Cristo para esta joven específica.
- Nadie termina mal si espera que el Señor envíe lo mejor de Él en su tiempo perfecto.
Por supuesto, los creyentes no reciben todo lo que piden. A veces, Dios simplemente dice que no. En otros casos ajusta nuestros deseos a los suyos. Por nuestra condición humana, no podemos conocer todos los detalles de una situación, por lo tanto, pedimos lo que pensamos que necesitamos, con base en nuestra limitada información.
- Un corazón sumiso acepta la dirección del Padre Celestial.
Cuando el esperado objeto del deseo llega, es posible que no se parezca a lo que el creyente pidió en un principio, pero será exactamente lo que necesita.
Esperar pacientemente en el Señor es un testimonio maravilloso,
pues cuando Él responde, otros ven la realidad de Dios, Su fidelidad
y el acierto de nuestra confianza, además, nuestra propia fe se fortalece
¡¡¡La paciencia es un atributo esencial para experimentar lo mejor de Dios!!!
CONFESIÓN DE FE:
LOS NECIOS SE APRESURAN PARA AGARRAR SU PAGO, PERO LOS CREYENTES SABIOS SABEN QUE LA BENDICIÓN VENDRÁ EN EL TIEMPO ACERTADO, ADECUADO Y PERFECTO DE DIOS, PUES ÉL SIEMPRE CUMPLE LO QUE PROMETE DE ACUERDO CON SU BUENA, AGRADABLE Y PERFECTA VOLUNTAD.
ORACIÓN:
Padre Celestial, El Rahee, el Dios que ve (Génesis 16:13). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, el Todopoderoso que ve y conoce todo eres Tú. Hoy vengo clamando a Ti, Dios lleno de sabiduría, para que me ayudes a poder, sin condiciones, temores ni dudas, adaptarme a tu calendario y aceptar tus tiempos, con la seguridad y la convicción de que Tú sabes que es lo mejor para mí, y cuál es el momento adecuado y perfecto para recibir lo que en tu voluntad has determinado también para mí. Estoy dispuesto a esperar pacientemente, seguro de que todo saldrá bien, de acuerdo con tu buena, agradable y perfecta voluntad; por eso tendré un corazón sumiso a tu dirección. Gracias Espíritu Santo por tu guía e instrucción permanentes para mi vida. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!