SALMO 127:3-5
Los hijos que tenemos son un regalo de Dios. Los hijos que nos nacen son nuestra recompensa. Los hijos que nos nacen cuando aún somos jóvenes, hacen que nos sintamos seguros, como guerreros bien armados. Quien tiene muchos hijos, bien puede decir que Dios lo ha bendecido. No tendrá de qué avergonzarse cuando se defienda en público delante de sus enemigos. (TLA)
¡¡¡El Corazón del Niño late al ritmo del Amor de sus Padres!!!
☝🏼 Lo que realmente necesitan los niños, inclusive con desesperación, son padres que:
♥ Jueguen a tirar y agarrar la pelota, disfruten las reuniones de té, o luchen porque el corazón de su niño está allí y partan a conquistarlo.
♥ Rían hasta que les duela el vientre y las lágrimas caigan de sus ojos, mientras en secreto crean una profunda relación y recuerdos que duren toda una vida.
♥ Cometan errores, pero considerándolos oportunidades maravillosas para aprender.
♥ Coloquen en la agenda de su vida un concierto preescolar desafinado, o un juego de futbol de niños, porque son de un infinito valor para aquellos que participan en ellos.
♥ Los amen en todo momento, porque el amor es un don dado libremente y no una recompensa por buen comportamiento.
♥ Los escuchen mirando a los ojos y con ambos oídos, incluso cuando esto signifique inclinarse sobre una rodilla.
♥ Admitan cuando estén equivocados y trabajen para arreglar las cosas.
♥ Escuchen a los necesitados y digan: ¡Hagamos algo para ayudarlos, ahora mismo! y activen un fuego incontrolable de generosidad y bondad.
♥ Den el crédito a los demás y otorguen poder a los que impacten para que tengan éxito en todo lo que hagan.
♥ Modelen el amor de Dios como acción, compromiso y verdad, incluso cuando duela porque crean que Dios puede obrar milagros aun en el corazón más duro.
♥ Amen al Señor su Dios con todo su ser, corazón, alma y espíritu, y sepan que el resto es solo detalles.
¡¡¡Todo esto sería un verdadero y significativo regalo para los niños, que supliría sus verdaderas y esenciales necesidades!!!
Un Abrazo, Dios te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; y permita que prosperes en todas las áreas de tu vida, y derrame sobre ti muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, Salud y mucha Prosperidad