1 PEDRO 1:3-5 (NTV) Que toda la alabanza sea para Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo. Es por su gran misericordia que hemos nacido de nuevo, porque Dios levantó a Jesucristo de los muertos. Ahora vivimos con gran expectación y tenemos una herencia que no tiene precio, una herencia que está reservada en el Cielo para ustedes, pura y sin mancha, que no puede cambiar ni deteriorarse. Por la fe que tienen, Dios los protege con su poder hasta que reciban esta salvación, la cual está lista para ser revelada en el día final, a fin de que todos la vean.
♥ Esto es solo parte de lo que somos en Cristo por nuestra fe: Elegidos, receptores y protegidos; y gracias a su fidelidad.
¡¡¡Somos elegidos por Dios para ser sus hijos, receptores de su amor y misericordia, y estamos permanentemente protegidos en Cristo; así que no tenemos por qué temer, pues el Dios Fiel y Todopoderoso es nuestro Dios!!!
El apóstol Pedro escribió la primera de sus dos epístolas para alentar a las personas que estaban sufriendo persecución. El discípulo decidió que la manera más natural de empezar la carta era recordando a los creyentes lo que son en el Señor Jesús.
☝🏼 Entonces, según la Palabra inspirada, esto es parte de lo que sus verdaderos seguidores somos en Cristo:
- Somos Elegidos en Cristo. No es que el Señor escoge a algunas personas para que entren al Cielo y a otras para que vayan al infierno. Antes bien, la Buena Nueva de Cristo es para todos (Juan 3:16; 2 Timoteo 2:10). Los “escogidos” son aquellos que reciben al Salvador voluntariamente y de corazón. La conclusión es que Dios le ama a usted, Él le eligió.
- Somos Receptores de Misericordia. Nadie puede decir que sus buenas obras le hicieron acreedor de un lugar en el Cielo. Somos salvos por la misericordia de Cristo (Tito 3:5). Dios nos amó tanto que abrió un camino para que podamos tener una relación íntima con Él ahora y siempre.
- Estamos Protegidos. El Salmo 34:7 dice: “El ángel del Señor es un guardián; rodea y defiende a todos los que le temen” (NTV). Estamos tan bien guardados en Cristo, que la única manera de que nuestras vidas puedan ser tocadas por la adversidad es si Dios lo permite. Eso no significa que no vamos a experimentar pérdidas ni conflictos. A veces, Dios permite que sus hijos anden en valles de sombra de muerte, pero como el Pastor que siempre protege, Jesús, permanece a su lado. (Salmo 23:4)
Entonces podemos concluir que el mensaje de la epístola de Pedro es sencillo:
♥ No tenga temor cuando atraviese tiempos difíciles, solo enfóquese en lo que usted es ahora en Cristo y en su fidelidad.
CONFESIÓN DE FE:
TENGO RAZONES PARA SER OSADO, CONFIADO Y TRIUNFANTE, PORQUE SOY UN HIJO DE DIOS ESCOGIDO, AMADO Y BIEN PROTEGIDO, POR LO QUE SOY AHORA EN CRISTO JESÚS.
ORACIÓN:
Dios Padre, El Gibor, Dios Fuerte y Poderoso (Isaías 9:6). Mi amado Dios y Señor, Jesucristo, estoy plenamente convencido de que Tú eres el guerrero más poderoso y la fuerza mayor en todo el universo, y me has creado a tu imagen y semejanza. Señor Jesús, gracias te doy porque me has dado una identidad, un valor, una aprobación, una aceptación y el amor infinito e incondicional que nadie más podría darme sin pedir algo a cambio. Lo que soy en Ti es incalculable, pero tengo la seguridad de ser un escogido, un receptor de tu misericordia y protegido permanentemente por tu Santo Espíritu. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo pues gracias a tu fidelidad ahora sé quién soy; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!