LUCAS 6:27-31 A los que están dispuestos a escuchar, les digo: ¡amen a sus enemigos! Hagan bien a quienes los odian. Bendigan a quienes los maldicen. Oren por aquellos que los lastiman. Si alguien te da una bofetada en una mejilla, ofrécele también la otra mejilla. Si alguien te exige el abrigo, ofrécele también la camisa. Dale a cualquiera que te pida; y cuando te quiten las cosas, no trates de recuperarlas. Traten a los demás como les gustaría que ellos los trataran a ustedes. (NTV)
♥ Del amor y de la guerra.
Un aspecto de confusión acerca de la guerra es la clara discrepancia entre las palabras de Jesús y la aprobación de la guerra por parte de Dios en el Antiguo Testamento.
?? ¿Pueden compaginarse estas enseñanzas diferentes?
?? ¿Cómo puede el Dios que dijo a Israel que destruyera a los cananeos, ser el mismo que dijo, “amen a sus enemigos y hagan bien a quienes los odian”?
Para aclarar esta cuestión, debemos distinguir entre las órdenes dadas a naciones, y las instrucciones dadas a personas. El Señor ha dado ciertas responsabilidades:
✓ A los gobiernos, los llama ministros de Dios para el bien, y los ha encargado de castigar el mal. (Romanos 13:4)
✓ Pero a las personas les dice: “No se venguen ustedes mismos”. (Romanos 12:19)
En la guerra se mata a personas, pero esto no es lo mismo que asesinato. Un soldado en el campo de batalla cumple sus obligaciones bajo la autoridad de su gobierno (Romanos 13:1,2). El asesinato, por el contrario, es la respuesta vengativa de una persona a la ira, a las diferencias de todo tipo, a los celos, etc., y está motivada por el deseo de destruir a otra persona.
¡¡¡Cuando los gobiernos castigan el mal, los inocentes son protegidos,
pero cuando los individuos buscan su propia venganza,
se destruyen a sí mismos y también a otros!!!
En el pasaje que estudiamos hoy, Jesús estaba hablando acerca de conflictos personales, no de guerras nacionales.
♥ ¿Nos apresuramos a dar batallas personales, pero somos lentos en afirmar el castigo del mal como nación?
CONFESIÓN DE FE:
ALGUNAS VECES, LA ÚNICA MANERA PARA QUE UN PAÍS TENGA PAZ, ES IR A LA GUERRA, PERO NUNCA TENDREMOS PAZ INTERIOR SI ESTAMOS EN GUERRA CON LAS PERSONAS QUE NOS HAN HECHO ALGÚN DAÑO.
ORACIÓN:
Padre Celestial, Elohay Shalom, Dios de Paz (Hebreos 13:20). Mi amado Señor Jesucristo, Dios de amor incomparable eres Tú, no ha existido nadie en el mundo que pueda demostrar el amor como Tú lo has hecho. Pero también eres un Dios Justo y por lo tanto se que tienes que lanzar juicio y sentencia sobre los errores de las naciones para protegernos a nosotros como ciudadanos. Gracias quiero darte hoy por la justicia Divina que has aplicado sobre mi vida y sobre los gobiernos, pero te clamo para que me ayudes a no tomar la justicia hacia mis semejantes por mis propias manos, pues Tú bien has dado instrucciones claras acerca tanto del amor como de la guerra, y aunque no lo podamos entender, se que en tus manos está todo bajo control, ayúdanos a mantenernos en el amor al prójimo y no en la guerra. Gracias, Padre Celestial por tu misericordia infinita para toda la humanidad; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!