ISAÍAS 40:28-31 ¿Acaso nunca han oído? ¿Nunca han entendido? El Señor es el Dios eterno, el Creador de toda la tierra. Él nunca se debilita ni se cansa; nadie puede medir la profundidad de Su entendimiento. Él da poder a los indefensos y fortaleza a los débiles. Hasta los jóvenes se debilitan y se cansan, y los hombres jóvenes caen exhaustos. En cambio, los que confían en el Señor encontrarán nuevas fuerzas; volarán alto, como con alas de águila. Correrán y no se cansarán; caminarán y no desmayarán. (NTV)
♥ De la fortaleza como el corazón de los cinco poderes que podemos hallar en medio de la crisis: desfallecimiento, angustia, FORTALEZA, victoria y unidad.
Dios tiene un propósito y un plan para cada uno de nosotros, y su tiempo de realización es perfecto. A veces, Él responde nuestras oraciones con “sí” o “no”; pero, en otras ocasiones, dice: “todavía no, espera”; cuando sucede esto último, podemos beneficiarnos de las ricas recompensas que se reciben por saber esperar, y en la fortaleza que solo en Él podemos encontrar en medio de la crisis.
Una bendición muy práctica es que Dios nos fortalece cuando nos apoyamos en Él durante los periodos de crisis. El pasaje que estudiamos hoy nos dice que:
♥ “En cambio, los que confían en el Señor encontrarán nuevas fuerzas” (Vs.31).
Se nos da la metáfora de un águila con el viento por debajo de sus alas. Es interesante notar que las palabras “viento” y “espíritu” tienen la misma raíz griega “pneuma”. El espíritu de Dios nos levanta y su energía y fuerza nos sostienen, cuando permanecemos en Él. Entonces cuando enfrentemos una situación o circunstancia difícil, en medio de la crisis, la clave efectiva es aprender a esperar. No hay ningún versículo de la Biblia que nos diga que tomemos el control y libremos nuestras propias batallas. Dios es quien las libra en favor nuestro, entonces la confianza en Él nos da la fortaleza. (2 Crónicas 20:15)
Cuando David enfrentaba sus más grandes batallas, esperaba en el Señor, confiaba en Él. Dios lo libraba de ser destruido y ponía sus pies en terreno firme (Salmo 40:1-3). Él hará lo mismo con nosotros. Si permanecemos en Él, Dios nos dará poder sobrenatural para realizar las cosas que Él requiere de nosotros, pues su Espíritu hace por nosotros, lo que no podemos hacer por nosotros mismos.
♥ Al leer la Palabra, vemos que cada vez que uno de los santos de Dios logró una victoria, es porque halló el poder de la fortaleza, esperando y confiando en el Señor.
¡¡¡El verdadero seguidor de Cristo puede experimentar la victoria en su vida,
cuando tiene al Creador Omnipotente del universo actuando a su favor,
no puede perder, pues en Él halla el Poder de la Fortaleza!!!
CONFESIÓN DE FE:
SERÉ PACIENTE EN LA CRISIS, PUES SE QUE EL SEÑOR LA UTILIZA COMO UNA HERRAMIENTA PARA FORTALECER MI CARÁCTER E INCREMENTAR MI FE, Y LA VICTORIA ES MÍA PUES ÉL SIEMPRE ESTÁ A MI FAVOR.
ORACIÓN:
Padre Celestial, Jehová Sabaot, Dios de los Ejércitos (2 Samuel 5:10). Mi Dios y mi Señor Jesucristo, Tú eres el ser más poderoso y el más grande guerrero en el universo, el general de tus ejércitos en el Cielo y en la Tierra, el Supremo comandante en jefe. Hoy me apropio de estos atributos tuyos para entender que en la espera en Ti puedo hallar el poder de la fortaleza, y está fundamentada en la absoluta confianza que en Ti tengo, pues me has dado victorias contundentes en mi vida y sé que siempre lo harás, pues como hijo de Dios cuento con tu favor. Gracias Padre Santo por la fortaleza que solo Tú me puedes dar; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!