MATEO 13:51,52 (NTV) ¿Entienden todas estas cosas?
- Sí—le dijeron—, las entendemos.
Entonces [Jesús] añadió:
- Todo maestro de la ley religiosa que se convierte en un discípulo del Reino del Cielo es como el propietario de una casa, que trae de su depósito joyas de la verdad tanto nuevas como viejas.
♥ Los verdaderos seguidores de Jesucristo debemos entender claramente y gozarnos con la idea de este pasaje que acabamos de leer, y es: el compartir los tesoros que Dios nos ha dado, que son frescos y familiares.
Una persona que enseña la Biblia, la Palabra, la Ley, los principios y valores del Reino, es como un dueño de casa o amo de su casa. Esta casa no es pequeña, sino que es una mansión, con una bodega llena de todo lo imaginable y aún con cosas que no son imaginables:
💝 Algunas veces él saca cosas nuevas que son refrescantes e insólitas. Estas cosas cautivan, inspiran y desafían la manera de pensar y de vida aceptada.
💝 Algunas veces él saca cosas viejas que son familiares pero olvidadas. Estas cosas que recuerdan el pasado, traen consuelo y perspectiva a nuestro pensamiento y vida.
Ambas cosas, las nuevas y las viejas, son valiosas y necesarias para mantenernos mental, emocional y espiritualmente saludables. El amo de la casa tiene la alegre responsabilidad y privilegio de compartir lo que está en la bodega que él supervisa. De igual manera los cristianos debemos hacerlo con la Palabra de Dios.
¡¡¡Todos los seguidores de Jesucristo tenemos la alegre responsabilidad y el privilegio de compartir las riquezas del Reino de Dios contenidas en Su Palabra; debemos compartir cosas nuevas que son frescas e inspiran, pero también las cosas familiares y reconfortantes que en Ella ofrece!!!
Si Dios es eterno, entonces Su Palabra habla para cada ocasión, aún así la palabra para una ocasión puede ser el “silencio”, pues a veces, muchas veces, Su amor es mejor comunicado y sentido cuando nuestras palabras no se interponen.
♥ Pero cada cierto tiempo, tenemos la oportunidad de ser parte del proceso de expresarles a otros los tesoros de Su amor.
CONFESIÓN DE FE:
ME ASEGURARÉ DE COMPARTIR CON GOZO EN EL CORAZÓN ALGO HOY, UNA PALABRA, UNA FRASE, UNA HISTORIA O AÚN EL SILENCIO MISMO, DE LOS TESOROS FAMILIARES Y FRESCOS CONTENIDOS EN LA PALABRA DE DIOS.
ORACIÓN:
Padre Santo y Todopoderoso, Elohim Kedem, Dios del Principio (Deuteronomio 33:27). Mi amado Señor Jesucristo, Tú, El Dios Todopoderoso siempre has sido, eres y serás. Existes y eres antes de todas las cosas en tiempo y en prioridad, por eso eres primero que todo en nuestros afectos. Sé que de Ti podemos sacar todos los tesoros contenidos en tu Palabra, en tu enseñanza y en la experiencia de tu Reino, que podemos vivir de tu amorosa y poderosa mano. Gracias Dios mío, pues eres como ese cofre lleno de joyas que podemos utilizar en los momentos más esperados o en los inesperados, de manera que traigan a nuestra vida, y a la de los que nos escuchan, un refrigerio fresco y familiar. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo por la oportunidad que me das de compartir tus buenas nuevas; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!
