GRACIA Y FINANZAS

EFESIOS 2:1-10(NTV) Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las cosas buenas que preparó para nosotros tiempo atrás.

El helado es un postre popular, aunque cada heladería sirve porciones diferentes. A quienes lo disfrutan no les lleva mucho tiempo identificar los establecimientos que ofrecen raciones más abundantes.

En el caso de Dios, Él es muy generoso, pues hace que su gracia abunde en nosotros para que tengamos todo lo que necesitamos para servirle y obedecerle (2 Corintios 9:8).

¡¡¡Dios nos asegura que su gracia, es decir, su bondad y favor inmerecidos,

se extenderá a todos los aspectos de nuestra vida, incluyendo nuestras finanzas;

y lo hace para que también podamos invertir generosamente

en su Reino con nuestros recursos y nuestras vidas!!!

☝🏼 Pero la definición de generosidad varía mucho; veamos:

Algunos cristianos entienden los preceptos de Dios y dan de buena gana y en abundancia. Estos creyentes han aprendido que Dios bendice nuestras finanzas para que podamos ser generosos con los demás, en vez de ocuparnos solamente de nuestra propia prosperidad.

Para otros, dar está “bien”, dan fielmente una “cantidad adecuada”.

Pero, lamentablemente, demasiados hijos de Dios se muestran avaros para con Él; o bien se niegan a compartir mucho de lo que tienen, o bien gastan la mayor parte en sí mismos.

La generosidad es un asunto del corazón y un estilo de vida.

Cuando el enfoque está en los demás, se da con libertad y alegría. Las personas con esta actitud confían en que Dios suple sus necesidades, y por eso se sienten libres para dar lo que desearían guardar para sí mismos.

No importa lo poco que tengamos, el Señor quiere que seamos dadivosos.

☝🏼 Piense en esto:

¿Conoce a alguien que es considerado generoso?

¿Es usted esa persona?

CONFESIÓN DE FE:

SERÉ GENEROSO CON LOS DEMÁS ENTENDIENDO QUE DIOS ES QUIEN ME PROVEE Y ME DARÁ TODO LO NECESARIO PARA PODER DAR A LOS DEMÁS SIN TEMOR DE NO PODER CUBRIR MIS NECESIDADES, PUES SÉ QUE ÉL YA LAS HA SUPLIDO.

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Chanum, Dios lleno de Gracia (Juan 1:16,17). Amado Dios y Señor nuestro, Jesucristo, Generoso y Misericordioso eres Tú, y sé que sustentado en estas grandes virtudes, te complaces en darnos abundantemente todo lo que necesitamos y anhelamos, aún cuando no lo merezcamos, por eso te pido que nosotros también podamos ser imitadores tuyos y caminemos en generosidad, entendiendo que así los demás te podrán ver a ti en nuestras generosas acciones. Gracias mi amado Señor y Salvador Jesucristo, por tu mano dadivosa en mi vida y por usarme para ser bendición en la vida de otros. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!

Pr. Juan Manuel Lamus O. ​(En colaboración con Rocio Camargo)

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