RESPONDIENDO A LA FRUSTRACIÓN

MATEO 1:18-21…24,25 (NTV)

Este es el relato de cómo nació Jesús el Mesías. Su madre, María, estaba comprometida para casarse con José, pero antes de que la boda se realizara, mientras todavía era virgen, quedó embarazada mediante el poder del Espíritu Santo. José, su prometido, era un hombre bueno y no quiso avergonzarla en público; por lo tanto, decidió romper el compromiso en privado. Mientras consideraba esa posibilidad, un ángel del Señor se le apareció en un sueño.

  • José, hijo de David —le dijo el ángel—, no tengas miedo de recibir a María por esposa, porque el niño que lleva dentro de ella fue concebido por el Espíritu Santo…

Cuando José despertó, hizo como el ángel del Señor le había ordenado y recibió a María por esposa, pero no tuvo relaciones sexuales con ella hasta que nació su hijo; y José le puso por nombre Jesús.

Esta es una buena pregunta: ¿Cómo responder a la frustración?

Para encontrar ejemplos de respuestas sabias y espirituales a la frustración, es más probable que usted vaya en la Biblia al libro de los Salmos antes que a Mateo.

Pero en el pasaje que estudiamos hoy, el primer capítulo del Nuevo Testamento, cuenta la historia de la respuesta de un hombre recto a una noticia dolorosa y decepcionante. José, el padre terrenal de Jesús, era una persona justa. Un hombre consagrado necesita una mujer que comparta su deseo de honrar y obedecer al Señor, y la Biblia dice que María era exactamente esa clase de mujer (Lucas 1:45-55). Por eso, imaginemos lo desconcertado que se debió haber sentido José cuando María regresó de una larga visita a su pariente Isabel y le dijo que estaba embarazada, y que, además, ningún hombre la había tocado. De cualquier modo que viera José su situación, ésta parecía funesta. Sin embargo, el Versículo 20 dice que lo “pensaba o consideraba”; es decir, buscaba una respuesta justa y sabia. Dios se hizo presente en la vida de José de manera contundente para corroborar la historia de María y ponerle fin a su plan de anular el matrimonio. El Señor cambió el lamento de José en baile (Salmo 30:11). María le había dicho la verdad, a pesar de lo extraña y sorprendente que era. La pareja soportaría la severa crítica pública de un embarazo antes de casarse, pero José dejó de pensar en lo que otros dirían.

¡¡¡Los cristianos convencidos, debemos buscar una respuesta espiritual a las frustraciones que enfrentemos en la vida; dado que el Señor siempre tiene un plan, la respuesta más sabia es esperar el bien que Él puede hacer, y esperar su tiempo!!!

Dios bendijo de manera especial y abundante a José por su disposición a buscar primeramente Su Reino. (Mateo 6:33)

¿Quiere usted también ser bendecido por Dios? Imítelo.

CONFESIÓN DE FE:

YO SÉ QUE DIOS TIENE LA RESPUESTA CORRECTA, OPORTUNA Y EXACTA PARA CADA SITUACIÓN DE MI VIDA QUE PUEDA LLEVARME A LA FRUSTRACIÓN; ASÍ QUE POR MÁS EXTRAÑA QUE PAREZCA SU INSTRUCCIÓN, LA SEGUIRÉ AL PIE DE LA LETRA.

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Deot, Dios de todo conocimiento (1 Samuel 2:3). Mi amado Señor Jesucristo, Dios Omnisciente eres Tú, lleno de sabiduría y poder. Y esta es una de las poderosas razones por las cuales puedo confiar en Ti plenamente y sin condición, pues como hiciste con José, siendo él un hombre justo y obediente, sé que puedes hacer conmigo, pues por la gracia de nuestro Señor y Salvador Jesucristo puedo entrar en tu presencia en cualquier momento y recibir el consejo y la instrucción adecuados y oportunos para cada situación de mi vida, de manera que la frustración o el desconcierto no serán parte de ella. Gracias mi amado Padre Celestial por el regalo de tu amado hijo Jesucristo, y gracias Espíritu Santo por tu presencia en mi vida y tu guía y cuidado permanentes; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!

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