2 CORINTIOS 6:1,2 Nosotros trabajamos junto con Dios y por eso les rogamos que no desaprovechen el generoso amor que recibieron de Él. Porque Dios dice:
- “Te escuché en el momento preciso y te ayudé cuando llegó el día de salvación”.
¡Escuchen! Este es el momento preciso. Hoy es el día de salvación. (PDT)
♥ De la buena y conveniente decisión de vivir un solo día a la vez.
Hay dos días en cada semana en los que no nos debemos preocupar, dos días que se deben guardar libres de miedo y ansiedad:
- Uno de esos días es “Ayer”.
✗ Ayer, con sus equivocaciones y pesares, sus faltas y confusiones, sus dolores, tristezas y deudas pendientes.
✗ Ayer ha pasado para siempre, fuera de nuestro control; y ni el dinero del mundo lo podría cambiar ni una cosa que hayamos hecho, ni siquiera podemos borrar una palabra.
✗ ¡Ayer ya pasó!
2. El otro día sobre el que no debemos preocuparnos es “Mañana”.
?? Mañana, con sus posibles adversarios, sus problemas, sus promesas grandes y sus pequeños logros.
?? Mañana volverá a salir el sol, ya sea en esplendor o detrás de una máscara de nubes, pero subirá.
?? Hasta que llegue no tenemos parte en mañana.
?? ¡Mañana aún no ha nacido!
✓ Y solo queda un día: “HOY”.
Cualquiera puede pelear la batalla de un solo día. Cuando nos cargamos con esos preocupantes “Ayer” y “Mañana”, entonces nos derrumbamos.
¡¡¡No es la experiencia de hoy la que vuelve locos a los hombres, sino
la amarga culpa de algo que sucedió ayer y el miedo de lo que traerá el mañana!!!
♥ Vivamos pues, tan sólo un día a la vez, para ser inmensamente felices; además, con la experiencia y la felicidad del hoy, construiremos, edificaremos, ganaremos y viviremos la felicidad del mañana.
CONFESIÓN DE FE;
ESTE ES EL DÍA ACEPTABLE Y EL HOY ES EL RETO MÁS GRANDE QUE TENGO FRENTE A MI. ENTONCES NO LO PERDERÉ, POR EL CONTRARIO, LO VIVIRÉ Y LO GANARÉ, ENTONCES EDIFICARÉ.
ORACIÓN:
Padre Santo, El Shaddai, eres Dios Todopoderoso y Suficiente (Génesis 17:1). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, hoy sé que Tú como una madre que amamanta, nutres y satisfaces completamente a tus hijos, los que en Ti creemos y en Ti confiamos, y tomas cuidado de todas nuestras necesidades. También sé que en Ti está el saber los tiempos y las sazones, y por eso yo me someto a tu buena, perfecta y agradable voluntad en la cual, estoy seguro, encontraré paz, felicidad, perfección, madurez y bienestar. Gracias quiero darte hoy pues Tú has hecho de mi pasado un ayer que ya paso, sirvió para aprender, pero sobre el cual ya no debo pensar; y un mañana lleno de bendiciones y cosas maravillosas de parte tuya, y asegurado en tu presencia me libraré de la angustia de lo que él traiga. Gracias, mi amado Señor y Salvador Jesucristo por tu compañía y protección de hoy, libre de miedo y ansiedad; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!