ALBOROTO

HECHOS 12:17,18 Él les hizo señas para que se callaran y les contó cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. “Díganles a Santiago y a los demás hermanos lo que pasó”, dijo. Y después se fue a otro lugar. Al amanecer, hubo un gran alboroto entre los soldados por lo que había sucedido con Pedro. Herodes Agripa ordenó que se hiciera una búsqueda exhaustiva para encontrar a Pedro. Como no pudieron encontrarlo, Herodes interrogó a los guardias y luego los condenó a muerte. (NTV)

Una vida devocional disciplinada y un trabajo concienzudo en la obra del Señor, como cuando en la Tierra de rodillas clamamos, hacen que el Cielo se mueva, se active y entonces se puede producir un gran alboroto. (Leer Hechos 12:1-19)

¡¡¡La Oración que humilde y fervientemente se eleva ante el Cielo,

es mucho más que una simple oración!!!

Es el clamor de un hijo de Dios que confiadamente se acerca al Trono del Señor creyendo en una respuesta y que ella podría causar alboroto,

y aún la muerte de cosas que oprimen y desgastan

En el pasaje que estudiamos hoy, podemos ver como la Iglesia oró por el Apóstol Pedro, entonces Dios contestó la oración y lo liberó milagrosamente, y esa oración contestada causó alboroto en la cárcel y llevó a la muerte a 16 soldados.

?? Alboroto es lo que queda aún por delante de nosotros:

La vida devocional produce alboroto porque Dios hará cosas nuevas y grandes.

Se sacudirán los cimientos del infierno y Dios nos dará ministerios renovados, nuevos, vibrantes, cristalinos y poderosos.

Milagros sucederán, señales nunca vistas y eso producirá alboroto.

Y habrá alboroto en la Iglesia y en los entornos en que nos movemos, por lo que Dios hará de nuestro ministerio y de nuestra vida; y todo por tener una vida devocional y un trabajo concienzudo en la obra.

La vida devocional mata algo. ¿Alguna vez pensó usted, que la oración contestada hizo que Herodes matara a 16 soldados? Sí, cuando nuestra vida devocional se incrementa y se refresca hace que muera todo aquello que nos maltrata, nos mata, nos quita la libertad o nos avergüenza. Muerte llega sobre lo que oprime y ata.

Levanta tu mirada, deja de llorar tu situación e incrementa y renueva tu vida devocional y veras que cuando caes de rodillas también caen a tierra sin vida tus angustiadores, entonces la vida nueva comienza a correr por tus venas.

CONFESIÓN DE FE:

ME ACERCARÉ ANTE EL TRONO DE DIOS CONFIADAMENTE. LIMPIARÉ LAS LÁGRIMAS DE MIS OJOS POR LAS PRESIONES QUE TENGO Y MIRARÉ EL INFINITO CON FE, ESPERANZA Y CONFIANZA; MI VIDA DEVOCIONAL HARÁ EFECTIVA MI ORACIÓN Y CAUSARÁ ALBOROTO.

ORACIÓN:

Dios y Señor Nuestro, El Gibor, Dios Todopoderoso (Isaías 9:6). Mi amado Dios sé que Tú eres un guerrero poderoso y la fuerza mayor en todo el universo, Dios del Cielo y de la Tierra, y Tú Señor Jesús, eres el Alfa y el Omega, eres quien controla el principio y fin de cada circunstancia de mi vida. Por eso hoy quiero darte gracias, por sostenerme con tu mano derecha para guiarme el resto del camino y sé que, al acercarme a Ti en oración, con fe, esperanza y totalmente confiado en tu sabiduría y poder infinitos, podré esperar un milagro portentoso e inimaginable para mi entorno, lo cual podrá causar alboroto y, aún más, la muerte de lo que me oprime. Gracias Padre Celestial por tus maravillosas promesas de victoria y libertad; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!

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