ROMANOS 8:12-17 (NTV)
Por lo tanto, amados hermanos, no están obligados a hacer lo que su naturaleza pecaminosa los incita a hacer; pues, si viven obedeciéndola, morirán; pero si mediante el poder del Espíritu hacen morir las acciones de la naturaleza pecaminosa, vivirán. Pues todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios. Y ustedes no han recibido un espíritu que los esclavice al miedo. En cambio, recibieron el Espíritu de Dios cuando Él los adoptó como sus propios hijos. Ahora lo llamamos “Abba, Padre”. Pues su Espíritu se une a nuestro espíritu para confirmar que somos hijos de Dios. Así que como somos sus hijos, también somos sus herederos. De hecho, somos herederos junto con Cristo de la gloria de Dios; pero si vamos a participar de su gloria, también debemos participar de su sufrimiento.
♥ Dondequiera que usted esté, puede ser un poderoso testigo de Jesucristo al andar obedientemente en el Espíritu Santo cada día. (Leer Romanos 8:1-17)
Si usted es un verdadero seguidor de Jesucristo, el Espíritu de Dios está actuando en su vida, aunque sienta o no su presencia. Él está conformando a los cristianos a la imagen del Salvador, y la evidencia de esta transformación se conoce como el fruto del Espíritu: el amor; el cual se desarrolla y se manifiesta en unos rasgos: gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza (Gálatas 5:22,23). Estos rasgos de carácter no los podemos generar por nosotros mismos, sino que son producidos por Dios en nosotros a medida que nos sometemos al Espíritu Santo y andamos en obediencia a Él. Entonces, nunca debemos subestimar el impacto del fruto espiritual cuando los no creyentes observan cómo reaccionamos ante la presión, tentación, sufrimiento o avalancha de problemas; y es que:
¡¡¡Al demostrar que vivimos el fruto del Espíritu, el amor y sus rasgos, como paz en vez de ansiedad, o dominio propio en lugar de palabras hirientes, damos testimonio de la belleza y el poder del Evangelio!!!
Una manera en que Dios usa las vidas llenas del Espíritu, es creando curiosidad en el no creyente, y una apertura al mensaje de salvación.
♥ Dondequiera que usted esté, puede ser un poderoso testigo de Jesucristo al andar obedientemente en el Espíritu Santo y manifestando su fruto y sus rasgos cada día.
CONFESIÓN DE FE:
CREO, EN VERDAD, QUE RECONOCER LA SOBERANÍA DE DIOS ES CLAVE PARA DESARROLLAR Y VIVIR EL FRUTO DE SU ESPÍRITU Y SUS RASGOS EN MI VIDA, Y QUE UNA PARTE IMPORTANTE DE RENDIRSE A SU CONTROL ABSOLUTO, ES ESPERAR QUE SE HAGA SU VOLUNTAD EN ELLA SIEMPRE, PARA LLEVAR A CABO CON DENUEDO EL LLAMADO.
ORACIÓN:
Espíritu Santo de Dios, El Rahee, Dios que me ve (Génesis 16:13). Dios y Señor mío, Jesucristo, todo lo ves y todo lo conoces, y Tú, Espíritu Santo, eres quien nos convence de pecado, de justicia y de juicio, a los que en Ti creemos y confiamos; por eso hoy clamo a Ti para que nunca dejes de trabajar en mi vida, la cual yo someto a tu voluntad, a tu guía e instrucción permanente, para que el amor, como fruto del Espíritu, y sus rasgos, sean totalmente evidentes en mi comportamiento, mi conducta y mi manera de relacionarme con mis semejantes. Gracias te doy por ese poder infinito que me has dado para forjar mi carácter y poder llevarlo a la estatura y a la plenitud de Cristo Jesús. Gracias Espíritu Santo por tu guía y tu cuidado permanentes; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!
